Nuestra experiencia de trabajo en Pomabamba nos lleva a la búsqueda de recursos para el aprendizaje y producción. Conocer el suelo es un contenido educativo que nos permite determinar qué tipo de cultivos podemos realizar o qué componente ayudaría para que la producción agrícola sea buena. El suelo de Pomabamba es arcilloso y requiere de muchos componentes adicionales para asegurar una buena producción agrícola, sin embargo es favorable a muchos arboles frutales que con poca agua pueden crecer y producir.

Hemos querido seguir investigando sobre el suelo de Pomabamba y encontramos en la quebrada hay arcilla muy concentrada y mitosa, lo que nos dio la idea de utilizar este recurso en un nuevo proyecto educativo  que se integre a nuestras actividades y propuesta curricular. Nos animamos a construir un horno para quemar objetos de arcilla como una actividad productiva, desarrollando sentidos y reflexiones sobre la tierra que nos ve crecer. Son gratas horas en contacto con la tierra que nos anima a cuidar, proteger y respetar la vida.