Johan y el ¡"NO"! de la Escuela

Johan es un niño de 8 años de edad y cursa el segundo grado de primaria en una escuela de nuestro barrio. Es un niño movedizo, juega con una cosa y rápidamente se cansa,  se distrae con facilidad,  muchas veces golpea a otros niños, aparentemente sin darse cuenta, y recibe llamadas de atención y castigo de parte de los adultos.

 

Johan Participa del programa de atención  del programa de la Esperanza. Por supuesto su personalidad es característica al lugar a donde vaya y le es muy difícil controlar su conducta. Nos animamos a seguir el día a día de Johan y conocer un poco más de él.  Su madre es comerciante de verduras en uno de los mercados de la ciudad. Johan debe levantarse a las 5:30 de la mañana  para bajar con  ella. Termina de dormir mientras su mamá arregla el puesto de venta.  A las 6:30 toma quinua de desayuno en uno de los puestos de la calle y luego, en combi, sube  a la Escuela de donde sale a la 1:00 p.m. para ir a almorzar al mercado, donde encuentra a su madre.

Entre las 3:00 y 3:30 asiste a nuestro programa donde recibe el apoyo en el desarrollo de tareas complejas o participar de los talleres que ofrecemos. No tiene problemas de aprendizaje,  sólo le gusta ser atendido o considerado en actividades importantes.

Terminando el año 2014 nos sorprendió escuchar que la escuela donde Johan estudia,  le dijo: “ NO, serás bienvenido el año 2015”, en otras palabras “Estás expulsado de la escuela por tu mal comportamiento”.

Nos preocupa el futuro del pequeño Johan, pero también nos preocupa una Escuela incapaz de mirar más allá de lo formal, que va rumbo a la nota más alta y no reconoce al “Ser Humano” que  se le encarga acompañar en su proceso de formación.

 

La Escuela es un derecho de todos.